Por
la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos, líbranos Señor Dios nuestro,
en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Ven Espíritu
Santo y llena los Corazones de Tus Fieles y enciende en ellos el fuego de Tu
Amor, envía Señor Tu Espíritu y se renovará la faz de la tierra; Oh Dios que
instruiste los Corazones de tus fieles con la luz del Espíritu Santo, haz que
por ese mismo Espíritu conozcamos el Amor a la Divina Justicia, y llénanos para
siempre de Celestiales consuelos por Cristo Nuestro Señor. Amén.
Señor Mío
Jesucristo, Dios y Hombre verdadero Creador, Padre y
Redentor Mío, por ser Tu quien Eres y porque Te Amo sobre todas las cosas, me
pesa en el Alma de todo corazón el haberte ofendido, propongo firmemente la
enmienda de mis pecados, confesarme, cumplir la penitencia que me fuera
impuesta, ofrezco mi vida, obras y trabajos en sacrificio de mis pecados, así
confío en Tu bondad infinita en que me perdonaras y me darás gracia para
enmendarme en Tu Santo servicio hasta el fin de mi vida. Amén.
Señor abre mis
labios y mi boca proclamará tu alabanza.
Acude
Señor en mi Auxilio, apresúrate Señor a socorrernos.
En los Cielos y
en la Tierra sea para siempre alabado, el Corazón amoroso
de Jesús Sacramentado.
Dadles Señor el
descanso eterno y luzca para ellos la luz perpetua.
Descansen en
paz. Así sea.
Padre Eterno, yo te ofrezco el cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de
tu Amadísimo hijo, Nuestro Señor Jesucristo, en desagravio por nuestros
pecados, y por los del mundo entero. Amén.
Jesús
aquí estoy para que me utilices como Tú desees. Jesús aquí estoy para inmolarme
contigo y ser agradable a Nuestro Padre Celestial. Jesús aquí estoy para que me
ames y permitas que esta miseria humana te ame, te adore, te alabe, y te
glorifique eternamente, por los siglos de los siglos. Amén.
Oh
Sangre y agua que brotaste del Sagrado Corazón de Jesús como una fuente de misericordia
para la humanidad, yo confío en Tí.
PRIMER
MISTERIO.
En este
misterio, nos ofrecemos víctimas junto con Tu Divino Hijo en desagravio por
nuestros pecados y por los del mundo entero; principalmente por aquéllos pecados
de Soberbia y Avaricia; también te ofrecemos nuestras enfermedades, nuestros
dolores, nuestras angustias, nuestras alegrías, nuestras miserias, nuestros
trabajos y nuestras vidas, enfermedades incurables que sufrimos y también te
ofrecemos las de todos aquellos que están hospitalizados, de los que van a ser
operados en este día, en esta noche. De las madres que
van a dar a luz, de todos los heridos, de los que están confinados a una cama,
en una silla de ruedas, en muletas o arrastrándose, de todos los ciegos, de los
que están perdiendo la vista, de todos los ancianos que no tienen que comer,
que no tienen que vestir, que no tienen hogar, que están enfermos; de todos los
presos hombres, mujeres y niños, de todas aquellas familias que sufren las
consecuencias de las guerras, de las inundaciones, de los terremotos, tragedias,
de todos aquellos niñitos huérfanos, desamparados, abandonados, que sufren
desnudes, que sufren opresión por parte de sus padres o de otras personas, que
sufren la separación de sus Padres. Todo esto te ofrecemos en desagravio por los pecados de la humanidad, por la conversión
de las almas a Ti consagradas que andan mal, por todos aquellos que han perdido
la confianza en Ti , has que regresen a Ti para que no se pierdan; por todos
los Sacerdotes, Religiosos, Religiosas y ministros, consérvalos en tu Santo
servició y líbralos del mal, por las vocaciones Sacerdotales, danos Sacerdotes
santos que sepan gobernar tu Santa Iglesia, por los misioneros has que sea
fructífera su labor, por la paz del mundo, por nuestro Santo Padre el Papa, por
las faltas de nuestro propio corazón, de nuestras familias, hermanos, amigos, parientes, conocidos, bienhechores, compadres,
ahijados, por todos los Siervos de la Divina Misericordia, por todos los
Siervos del Divino Amor y por toda la Jerarquía Eclesiástica, danos a todos tu gracia
para que por medio de ella, nos arrepintamos por todo lo que hemos ofendido,
humildemente imploramos tu misericordia y así salves nuestras almas.
Mira
que te lo pedimos por la Preciosísima Sangre de Tu Divino Hijo, por tu Divina
Misericordia y por la intercesión del Corazón Inmaculado de María Santísima, te
lo pedimos Señor.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos
del mal. Amén.
¡Dios te Salve!,
Reina y Madre de Misericordia, vida, dulzura y
esperanza nuestra, ¡Dios te Salve!, a Ti llamamos los desterrados hijos de Eva,
a Ti suspiramos gimiendo y llorando en este valle de lágrimas. ¡Eah pues!, Señora
y abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos y después de
este destierro, muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre, ¡Oh clemente!,
¡oh piadosa!, ¡oh dulce Virgen María!
Ruega
por nosotros Santa Madre de Dios. Para que seamos
dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo. Amén.
Creo en un solo
Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la
tierra, de todo lo visible y lo invisible. Creo en un solo Señor Jesucristo, Hijo
único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos, Dios de Dios, luz de
luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado; de la misma naturaleza del Padre por quien todo fue
hecho, que por nosotros los hombres y
por nuestra salvación, bajo del cielo y por obra del Espíritu Santo, se encarno
de María la Virgen y se hizo hombre y por nuestra causa fue crucificado en
tiempos de Poncio Pilato, padeció y fue sepultado y resucito al tercer día según
las escrituras y subió al cielo y está sentado a la derecha del Padre y de
nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos y su reino no tendrá fin.
Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del
Hijo, que con el Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria y que
hablo por los profetas. Creo en la Iglesia que es una, Santa, Católica y Apostólica,
confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados, espero la
resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro. Amén.
(Con un rosario Mariano se
repite esta invocaciones y jaculatorias después de cada misterio)
(Se dice y se contesta diez veces)
Por la Pasión Dolorosa de Jesús. Ten misericordia de nosotros y del mundo entero.
Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio ahora y siempre por los siglos de
los siglos. Amén.
Dale señor el descanso eterno. Y
luzca para ellos la luz perpetua.
Descansen en paz, así sea.
Padre Eterno, yo
te ofrezco el cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de tu Amadísimo hijo, nuestro
Señor Jesucristo, en desagravio por nuestros pecados, y por los del mundo
entero. Amén.
SEGUNDO MISTERIO.
En este
misterio nos ofrecemos Víctimas, junto con Tu Divino Hijo en desagravio por
nuestros pecados y por los del mundo entero. Principalmente por aquéllos pecados
de lujuria y de ira y también te pedimos por todos aquellos hermanos que están
agonizando en estos momentos, que están entregando la cuenta de su vida. Ten misericordia de ellos. Te pedimos por todos
aquellos que vayamos a morir en este día, principalmente aquellos que estemos
en peligro de perderte, danos a todos tu gracia para que por medio de ella nos
arrepintamos de lo que te hemos ofendido, humildemente imploremos tu
Misericordia y así salves nuestras almas. Te pedimos por el eterno descanso de
las almas del purgatorio principalmente por nuestros familiares y por todos
aquellos que nadie pide por ellos, sácalos de su calvario y llévalos a gozar de
Tu Santa Gloria. Mira que te lo pedimos por la Preciosísima
Sangre de Tu Divino Hijo, por Tu Divina Misericordia y por Intercesión del
Corazón Inmaculado de María Santísima. Te lo pedimos Señor.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos
del mal. Amén.
(Se repite las invocaciones y
jaculatorias indicadas en el 1er. Misterio)
TERCER MISTERIO.
En este
misterio nos ofrecemos víctimas junto con Tu Divino Hijo, en desagravio por nuestros
pecados y por los del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de Gula
y Envidia, y también te pedimos por la conversión de los herejes, cismáticos,
ateos, judíos, masones, comunistas, de los desesperados, de todos aquellos
hermanos separados de la Iglesia, reúnenos a todos para que seamos un solo
rebaño, bajo un solo Pastor, te pedimos por aquellos que están a punto de
suicidarse. Ten misericordia de ellos. Te
pedimos por todos aquellos que te odian, que te aborrecen, que te maldicen, que
te ultrajan, nosotros te amamos por ello y te pedimos que nos des a todos tu Gracia
para que por medio de ella nos arrepintamos de todo lo que te hemos ofendido,
humildemente imploremos tu misericordia y así salves nuestras almas. Te pedimos
por las autoridades civiles, militares, y religiosas, dales un corazón bueno
sencillo prudente y sabio para que gobiernen al mundo según tu Corazón. Mira que te lo pedimos por la Preciosísima Sangre de Tu
Divino Hijo, por Tu Divina Misericordia y por Intercesión del Corazón
Inmaculado de María Santísima. Te lo pedimos Señor.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal.
Amén.
(Se repite las invocaciones y
jaculatorias indicadas en el 1er. Misterio)
CUARTO MISTERIO.
En este
misterio, nos ofrecemos víctimas junto con Tu Divino Hijo en desagravio por
nuestros pecados y por los del mundo entero, principalmente por aquellos pecados
de Pereza, Vanidad, Impureza y te
pedimos por todos aquellos que no te conocen, permite que llegue hasta ellos la
luz de tu Santo Evangelio para que te conozcan, te amen, te adoren te den su
corazón, te pidan perdón por lo que te han ofendido y así salven sus almas. Te
pedimos por los rateros, asesinos, secuestradores, terroristas que no tienen
compasión de sus víctimas, por todos aquellos padres de familia que matan a sus
hijos; por las prostitutas, por los adúlteros, por todos los pecadores de
homosexualidad, por todos aquellos hermanos que viven alejados de Tí, por todos
los que propician el aborto, por todos los que manejan vehículos marítimos,
terrestres, y aéreos, por los estudiantes, por los viajeros, por los
profesionistas, por los trabajadores en general; especialmente te pedimos por
aquellas familias que no tienen que comer, que vestir que no tienen hogar, que
están enfermos, que no tienen trabajo, socórrelos Señor para que no desfallezcan
de hambre, y de miseria y danos a todos tu gracia para que por medio de ella
nos arrepintamos de lo que te hemos ofendido, humildemente imploremos tu
misericordia y así salves nuestras almas. Mira que te
lo pedimos por la Preciosísima Sangre de Tu Divino Hijo, por Tu Divina
Misericordia y por Intercesión del Corazón Inmaculado de María Santísima. Te lo
pedimos Señor.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos
del mal. Amén.
(Se repite las invocaciones y
jaculatorias indicadas en el 1er. Misterio)
QUINTO MISTERIO.
En este
misterio nos ofrecemos víctimas junto con Tu Divino Hijo en desagravio por nuestros
pecados y por los del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de Blasfemia,
de Ultraje, pecados sacrílegos y por todos los pecados que vayamos acometer en
este día o que se vayan a cometer; humildemente te pedimos perdón por todas
esas faltas con que ofendemos a Tu Divina Majestad, ten misericordia de nosotros,
ten piedad de la humanidad, te pedimos por toda la juventud, que anda descarriada,
principalmente por aquellos hijos pródigos para que regresen a sus casas, no se
pierdan y dejen de sufrir sus padres. Ayúdalos Señor. Te
pedimos por los matrimonios separados, por los que viven en amasiato, en
adulterio, que viven mal, por las viudas, por los viudos, por las madres
solteras, abandonadas, por los padres solteros, abandonados, por los
indigentes, los alcohólicos, drogadictos, pandilleros, rateros y delincuentes,
danos a todos tu gracia, para que por medio de ella nos arrepintamos de los que
te hemos ofendido; humildemente imploremos tu misericordia y así salves
nuestras almas. Mira que te lo pedimos por la
Preciosísima Sangre de Tu Divino Hijo, por Tu Divina Misericordia y por
Intercesión del Corazón Inmaculado de María Santísima. Te lo pedimos Señor.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos
del mal. Amén.
(Se repite las invocaciones y
jaculatorias indicadas en el 1er. Misterio)
Señor Mío
Jesucristo, te doy gracias por tu inmenso amor, porque
nos has permitido entrar a Tu Corazón, y morar en él, porque has fundido
nuestro Corazón al Tuyo y porque solo vivimos con Tu propio Corazón, por eso
queremos aclamar al Dios Santo y Eterno.
Padre Celestial
que eres Dios. Te amo, te amo, te amo.
Hijo Redentor
del mundo que eres Dios. Te amo, te amo, te amo.
Espíritu Santo
que eres Dios. Te amo, te amo, te amo.
Santísima
Trinidad que eres un solo Dios. Te amo, te amo, te amo.
Gloria al Padre
y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio
ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.
Rezamos un
Padre Nuestro al Sagrado Corazón de Jesús, para que si tiene a bien damos un
buen día, nos de permiso de amanecer; a todos los de la familia que andamos
fuera de nuestra casa, nos libre de los peligros tanto materiales como
espirituales. Así nos lo conceda.
Nos unimos a la
intención de la Santísima Virgen María y te damos infinitas gracias porque nos
has conservado la vida y nos has dado Tu gracia, te pedimos que nos asistas en el
último momento y nos concedas perseverar hasta el fin. Te pedimos que nos
concedas el Don del Latido.
Padre nuestro,
que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad, en la tierra como en el cielo. Danos
hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y líbranos
del mal. Amén.
Dios te salve
María, llena de Gracia, el Señor es contigo, bendita Tu entre las mujeres y Bendito
el fruto de tu vientre Jesús. Santa María Madre de
Dios, ruega por nosotros pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Gloria al Padre
y al Hijo y al Espíritu Santo. Como era en el principio,
ahora y siempre por los siglos de los siglos. Amén.
Jesús, José y María. Les doy el Corazón y el Alma Mía.
Jesús, José y María. Asísteme en mi última agonía.
Jesús, José y María. Contigo descansa en paz el Alma Mía.
(Se dice y
se contesta tres veces)
Sagrado Corazón
de Jesús. En Tí Confío.
Santa María
Reina de México. Salva nuestra Patria y conserva nuestra
Fe.
Corazones de
Jesús y María. Sean ustedes la Salvación nuestra.
Tu Divina Providencia
se extienda a cada momento. Para que nunca nos falte Tu
Gracia, paz, casa, vestido y sustento.
Tu Divina
Providencia se extienda a cada momento. Para que nunca
nos falte Tu Gracia, paz, casa, vestido y sustento. Y a la hora de la muerte,
el Divino Sacramento.
ORACION.
Oh Jesús, yo te pido
humildemente me concedas la gracia de salvar una alma por cada latido de mí
Corazón, unido a los latidos del Tuyo y a los del Corazón Inmaculado de María
Santísima, Te lo suplico por Tu Preciosísima Sangre y por Tu Divina Misericordia.
Amén.
(Se dice y se contesta la misma invocación.)
Señor, ten
piedad de nosotros.
Cristo,
ten piedad de nosotros.
Señor, ten
piedad de nosotros.
Jesucristo,
óyenos.
Jesucristo,
escúchanos.
(Después
de cada invocación, se contesta “Ten piedad de nosotros”)
Padre
Celestial, que eres Dios.
Hijo
Redentor del mundo, que eres Dios.
Espíritu
Santo, que eres Dios.
Santísima
Trinidad, que eres un solo Dios.
(Después de cada invocación, se contesta “Confiamos en Ti”)
Jesús Rey
de Misericordia, que has redimido el mundo.
Jesús Rey
de Misericordia, por quien todas las cosas fueron creadas.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos has santificado.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos has revelado el misterio de La Santísima Trinidad.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos revelaste la Omnipotencia de Dios.
Jesús Rey
de Misericordia, que te manifiestas en la creación de los espíritus celestiales.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos formaste de la nada.
Jesús Rey
de Misericordia, que abrazas todo el mundo.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos das la vida eterna.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos proteges del castigo merecido.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos libras de la miseria del pecado.
Jesús Rey
de Misericordia, que te has encarnado para nuestra justificación.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos concedes misericordia por Tus Santas llagas.
Jesús Rey
de Misericordia, que brota de Tu Santísimo Corazón.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos distes a la Santísima Virgen María, como Madre de Misericordia.
Jesús Rey
de Misericordia, por la cual has sufrido Tu Encarnación, Pasión y Muerte.
Jesús Rey
de Misericordia, por medio de la cual ayudas a todos, en todas partes y siempre.
Jesús Rey
de Misericordia, por la cual nos has prevenido con Tus Gracias.
Jesús Rey
de Misericordia, la que has manifestado revelándonos los Misterios Divinos.
Jesús Rey
de Misericordia, que manifestaste instituyendo Tu Santa Iglesia.
Jesús Rey
de Misericordia, que habiendo instituido los Santos Sacramentos, nos abriste
los torrentes de Tu Gracia.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos has dado los Santos Sacramentos del Bautismo y de la
Penitencia.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos has dado la Santísima Eucaristía y el Sacerdocio.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos has llamado a Nuestra Santa Fe.
Jesús Rey
de Misericordia, que la manifiestas en la conversión de los pecadores.
Jesús Rey
de Misericordia, que la manifiestas iluminando a los infieles.
Jesús Rey
de Misericordia, que la manifiestas por la santificación de los justos.
Jesús Rey
de Misericordia, que llevas a los Santos a la cumbre de la Santidad.
Jesús Rey
de Misericordia, que brota de Tus Santas llagas.
Jesús Rey
de Misericordia, que brota en Tu Santísimo Corazón.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres el único consuelo de los enfermos y afligidos.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres el único consuelo de los corazones afligidos.
Jesús Rey
de Misericordia, que das la esperanzas a las almas que se hallan en la desesperación.
Jesús Rey
de Misericordia, que acompañas a todos los hombres siempre y en todas partes.
Jesús Rey
de Misericordia, que nos colmas con el torrente de Tu Gracia.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres el consuelo de las almas del purgatorio.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres la Corona de todos los Santos.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres el gozo celestial de los que se salvan.
Jesús Rey
de Misericordia, que eres la fuente inagotable de los milagros.
Cordero de
Dios, que quitas el pecado del mundo. Perdónanos Señor.
Cordero de
Dios, que quitas el pecado del mundo. Óyenos Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del
mundo, Ten piedad y misericordia de nosotros.
Las Misericordias de Dios, son más grandes que
todas sus obras. Por eso cantaré las Misericordias de
Dios para siempre.
ORACION.
Oh Dios, cuya Misericordia es infinita y cuyos tesoros de compasión no
tienen limite, míranos con Tu favor y aumenta Tu Misericordia dentro de
Nosotros, para que en nuestras ansiedades no desesperemos, sino que siempre con
gran confianza, nos conformemos con Tu Santísima Voluntad, la cuál es igual que
Tu Misericordia, por Nuestro Señor Jesucristo Rey de Misericordia quien Contigo
y el Espíritu Santo, manifiesta Misericordia hacia nosotros por siempre. Amén.
CONSAGRACION AL CORAZON DE JESUS.
Jesús
yo deseo consagrarme a Tu Corazón Amantísimo y acepto darte mi voluntad, recibiendo
en cambio la Tuya, para que así llegue a reinar Mi Padre Celestial y que el
Espíritu Santo me ilumine junto con mi Madre Santísima, para que te sea yo fiel
en todos los instantes de mi vida y persevere hasta la muerte. Amén.
CONSAGRACION AL CORAZON INMACULADO DE
MARIA SANTISIMA.
Yo
Hijo tuyo me consagro a Tu Corazón dolorido e Inmaculado, Madre Mía yo seré fiel
con Tu ayuda y protección, a Ti te doy mi Corazón para que este junto al de Tu
Divino Hijo y sea yo librado del fuego eterno, yo rechazo a Satanás y a todas sus
pompas, porque Madre Mía siendo yo Tu Hijo no podre servir nunca al enemigo de Jesús,
toma mi libertad Tú serás mi guía, yo te entrego mi vida, mi Sangre y todo cuanto
soy, dame tu gracia Madre Mía para que muera para el mundo y solo viva para Ti
y así ame los Corazones de Jesús y de María hasta la muerte mía. Amén.
ORACIÓN A MARÍA.
Préstame
Madre tus ojos, para con ellos mirar, porque si con ellos miro, nunca volveré a
pecar.
Préstame
Madre tus labios, para con ellos rezar, porque si con ellos rezo, Jesús me podrá
escuchar.
Préstame
Madre tu lengua, para poder comulgar, pues es tu lengua patena, de amor y de
santidad.
Préstame
Madre tus brazos, para poder trabajar, y así rendirá el trabajo una y mil veces
más.
Préstame
Madre, tu manto, para cubrir mi maldad, pues cubierta con tu manto, al cielo he
de llegar.
Préstame
Madre tu Hijo, para poderlo yo amar, si tú me das a Jesús, que mas puedo yo
desear.
Y
esta será mi dicha, por toda la eternidad. Amén.
VISITA NOCTURNA.
Quédate
con nosotros Señor esta noche, quédate para adorar, alabar y dar gracias por
nosotros mientras que dormimos, para hacer que baje del cielo Tu misericordia
sobre el mundo, para socorrer desde los Tabernáculos de la tierra, a las almas
que padecen en el purgatorio su prolongada noche de sufrimientos y penas,
quédate con nosotros Señor, para apartar la justa ira de Dios de nuestras
populosas ciudades, cuyas densísimas nubes de vicios y crímenes claman venganza
al cielo, quédate con nosotros Señor, para guardar a los inocentes, para
sostener a los tentados, para levantar a los caídos, para subyugar el poder del
demonio, para impedir el pecado, quédate con nosotros Señor para confortar a
los que sufren, para bendecir a los que yacen en el lecho del dolor, para dar
contrición a los que mueren, para recibir a las miles de almas que se
presentarán ante Ti para ser juzgadas, ¡Oh buen pastor!, quédate con tus
ovejas, defiéndelas de los peligros que las rodean y amenazan, pero sobre todo
quédate con los que sufren y los agonizantes, danos una noche tranquila y un
fin perfecto, se nuestro misericordioso Padre hasta lo último, para que sin
temor podamos aparecer delante de Ti como nuestro Juez, quédate con nosotros
Señor, en el corazón de todos los aquí presentes. Así sea.
PROMESAS DE LA DIVINA MISERICORDIA.
1.
– Yo prometo al alma que venere esta
imagen de la misericordia, que no perecerá.
2.
–Yo le prometo aquí en la tierra, la
victoria sobre sus enemigos, especialmente en la hora de la muerte.
3.
– Yo el Señor, la protegeré como mi propia Gloria.
4.-
Estos rayos de mi corazón, que significan
sangre y agua, protegen a las almas de la ira de mi Padre.
5.-
Feliz el que viva bajo su sombra pues la
mano de la justicia de Dios no la alcanzará.
6.-
A las almas que propaguen mi
misericordia, yo las protegeré por toda su vida, como una madre a su niño.
7.-
Y en la hora de la muerte, para ellos no
seré juez sino redentor.
8.-
En esta última hora el alma no tiene otra
protección, que mi misericordia.
9.-
Feliz aquella alma que durante su vida,
estuvo hundida en mi misericordia, pues la justicia de Dios, no la alcanzará.
10.- La humanidad no
encontrará paz hasta que venga con confianza a mi misericordioso corazón y les
daré la paz
Descarga aquí, el texto en PDF de esta devoción:
http://www.mediafire.com/?r9546x2han3no13
Descarga aquí, el audio en MP3 de esta devoción:
http://www.mediafire.com/?r6169rmy44qi442
http://www.mediafire.com/?r9546x2han3no13
Descarga aquí, el audio en MP3 de esta devoción:
http://www.mediafire.com/?r6169rmy44qi442