(por Santa Margarita María Alacoque)
Señor Jesucristo, Redentor del género humano, nos dirigimos a tu Sacratísimo Corazón con humildad y confianza, con reverencia y esperanza, con un profundo deseo de darte gloria, honor y alabanza. Señor Jesucristo, Salvador del mundo, te damos las gracias por todo lo que eres y todo lo que haces. Señor Jesucristo, Hijo de Dios Vivo, te alabamos por el amor que has revelado a través de Tu Sagrado Corazón, que fue traspasado por nosotros y ha llegado a ser fuente de nuestra alegría, manantial de nuestra vida eterna. Reunidos juntos en Tu nombre, que está por encima de todo nombre, nos consagramos a tu Sacratísimo Corazón, en el cual habita la plenitud de la verdad y la caridad. Al consagrarnos a Ti, los fieles (persona o de lugar) renovamos nuestro deseo de corresponder con amor a la rica efusión de tu misericordioso y pleno amor. Señor Jesucristo, Rey de Amor y Príncipe de la Paz, reina en nuestros corazones y en nuestros hogares. Vence todos los poderes del maligno y llévanos a participar en la victoria de tu Sagrado Corazón. ¡Que todos proclamemos y demos gloria a Ti, al Padre y al Espíritu Santo, único Dios que vive y reina por los siglos de los siglos! Amén.
Consagración al Doloroso e Inmaculado Corazón de María
(por San Luis-María Grignion de Montfort)
Oh Corazón Inmaculado de María, por tu perfecta comunión de amor con el Corazón de Jesús, eres la escuela viviente de total consagración y dedicación a Su Corazón. En tu Corazón, Oh Madre, queremos vivir para aprender a amar, sin divisiones, al Corazón de Jesús; a obedecerle con diligencia y exactitud; servirle con generosidad y a cooperar activa y responsablemente en los designios de Su Corazón. Deseamos consagrarnos totalmente a tu Doloroso e Inmaculado Corazón que es el camino perfecto y seguro para llegar al Corazón de Jesús. Tu Corazón, es también refugio seguro de gracia y santidad, donde nos vamos liberando y sanando de todas nuestras oscuridades y miserias. Deseamos pertenecer a tu Corazón, Oh Virgen Santísima, sin reservas y en total disponibilidad de amor a la voluntad de Dios, que se nos manifestará a través de tu mediación maternal. En virtud de esta consagración, Oh Inmaculado Corazón, te pedimos que nos guardes y protejas de todo peligro espiritual y físico. Que nuestros corazones ardan con el fuego del Espíritu como arde tu Corazón. Que unidos a ti, que eres la portadora por excelencia de Cristo para el mundo, y ungidos por el poder del Espíritu Santo, seamos instrumentos para la Gloria de Dios y para la salvación de las almas. Amén.
Consagración de las Familias al Sagrado Corazón de Jesús y al Doloroso e Inmaculado Corazón de María
Santísimos Corazones de Jesús y de María, unidos en el amor perfecto, mírennos con misericordia y cariño. Consagramos nuestros corazones, nuestras vidas y nuestras familias a Ustedes bajo la poderosa intercesión de San José. Conocemos que el ejemplo bello de Su hogar de Nazaret fue un modelo para cada una de nuestras familias. Esperamos obtener, con Su ayuda, la unión y el amor fuerte y perdurable que nos dieron. Que nuestro hogar sea lleno de gozo. Que el afecto sincero, la paciencia, la tolerancia, el respeto mutuo y el perdón de corazón, sean dados libremente a todos. Que nuestras oraciones incluyan las necesidades de los demas, no solamente las nuestras. Y que siempre estemos cerca de los sacramentos. Bendigan a todos los presentes y también a los ausentes, tanto los difuntos como los vivientes; que la paz esté con nosotros, y cuando seamos probados, concédannos la resignación cristiana a la Voluntad de Dios. Mantengan nuestras familias cerca de Sus Corazones; que Su protección especial esté siempre con nosotros. Sagrados Corazones de Jesús y de María, escuchen nuestra oración. Amén.
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1 comentario:
Las "oraciones de Consagración" fueron bajadas directamente de un CD de la "Misión por el amor de Dios en todo el mundo", capítulo México.
el vínculo a su página es:
http://www.porelamordediosentodoelmundo.org/
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